Arropó con su voz hace un lustro la presentación de Yupanqui, coplas del payador perseguido. A partir de ese momento Carmen de la Jara forma parte de mis amistades más preciadas y es cómplice musical de muchas de mis aventuras literarias. Su talla de cantaora no hace falta detallarla. Escrita está por los flamencólogos. Se sabe que ha bordado los palos más exigentes del flamenco y también que su voz domina una serie de registros que le permiten acercarse a otros géneros musicales. Por eso mismo hizo suyo a Yupanqui y por eso mismo ha grabado un disco como Puerto de Indias que liga los cantes de Cádiz con los que vienen del otro lado del Atlántico. El resultado es espléndido, está cuajado de luz, de sonoridad, de vibrante musicalidad. En todo ello algo tiene que ver la impecable producción musical de Juan José Alba que crea el marco idóneo para el lucimiento de la cantaora gaditana.
En Puerto de Indias aparece Mariana Cornejo con su gracia canora y suenan los ecos de la guajira flamenca que clavó Chano Lobato, las cuecas que solía silbar Pablo Neruda, el lírico temblor de una vidalita argentina que vierte la flor cadenciosa de su melancolía. La guajira flamenca "Yo no digo" la cantan y bordan Javier Ruibal y Carmen de la Jara con Juan José Téllez dejando la impronta de su huella lírica. El repertorio seleccionado del folclore americano es llevado al compás flamenco, como hacían los antiguos que absorbían todo lo que llegaba de lejanas tierras. Y como parte de ese compás, de esa raíz flamenca y universal, suenan "El manisero", "La sandunga" o "María Chechena" con su caricia festera.
Puerto de Indias incluye fuera de programa "Desde la torre", adaptación musical de un poema original de José Manuel García Gómez. Cuando preparé con Pepe Freire el documental En medio de las olas sabíamos que en ese homenaje a mi padre no podía faltar la voz blanquísima de Carmen de la Jara. Le pasé aquel poema titulado "Cádiz desde la Torre Tavira" en la que el poeta gaditano divisaba su blanca ciudad trimilienaria desde lo alto de la Torre Tavira. En ese ejercicio poético cabe la oda encomiástica pero también el retrato de la indolencia que parece sumir a la ciudad en un estado de letargo crónico. El poema cayó en manos de Juan José Alba que le halló la música que estaba esperando, dándole unas alas que yo jamás hubiera imaginado.
Mi padre se sentiría feliz con esta adaptación musical de sus versos que permanecerán siempre en esta grabación sonora de Carmen de la Jara. En la presentación de Puerta de Indias en el Teatro Falla "Desde la torre" sonó imponente con una introducción que difería de la grabada originalmente para el documental. Había mucho que celebrar esa noche en el Falla, mucho que compartir con Carmen de la Jara. No sólo se trataba de la puesta de largo del disco sino de celebrar el acompañamiento de mis amigos Al&Cris Tango en "Vidalita" o la aparición en escena de Alejo Martínez que dibujó "El malecón de Cádiz" y trajó un trozo de Cuba al escenario. Todos participaron de la fiesta de un disco que engarza con las conmemoraciones que la ciudad de Cádiz se apresta a vivir en este 2012 de tantísimas incertidumbres.